CEMENTO REFRACTARIO 3,5 KG RESISTENTE A 1500ºC

30,43 €
Impuestos incluidos Envío en 24 - 48 horas
Cantidad
En stock

Cemento refractario resistente a la llama y a temperaturas de hasta 1500ºC sin agrietado, con una gran adherencia sobre cementos y ladrillos refractarios de chimeneas y hogares.


Se endurece al contacto con el calor, proporcionando un gran sellado.

Almacenar en lugar fresco y seco.

De uso interior únicamente.

---

Las chimeneas y las estufas nos ofrecen calidez en nuestros hogares los días de frío. Sin embargo, para mantener viva la llama y asegurar el calor y el confort en el interior de nuestra vivienda, es esencial mantener el correcto funcionamiento de chimeneas y estufas. 

El paso del tiempo, el calor extremo y el uso de forma intermitente de estufas y chimeneas hacen que tengamos que reponer piezas, mantener su papel de forma correcta o invertir en productos para mejorar su funcionamiento. 

Uno de los repuestos más necesarios en el mantenimiento y mejora de nuestros equipos de estufas y chimeneas es el cemento refractario, capaz de restaurar no sólo la funcionalidad de estos equipos sino también su estética y la seguridad de los mismos. 

Y es que una chimenea o estufa en mal estado no solo presenta un aspecto deslucido, sino que también puede comprometer el rendimiento y la seguridad de tu hogar y sus habitantes. Los repuestos actúan como los pilares fundamentales que mantienen el equilibrio entre el funcionamiento eficiente y la belleza duradera.

¿Qué es el cemento refractario?

El cemento refractario es una amalgama ingeniosa de agregados especiales y ligantes de alta resistencia térmica. Su nombre deriva del término "refractario", que denota la habilidad de un material para soportar temperaturas extremas sin ceder ante la fragilidad y la deformación. 

Este compuesto se ha vuelto una columna vertebral en la construcción y mantenimiento de chimeneas y estufas, donde la resistencia a las altas temperaturas es esencial.

El cemento refractario, al revestir las cámaras de combustión y los revestimientos internos, asegura una distribución uniforme del calor y una protección contra el desgaste térmico. Esto no solo garantiza que el fuego arda con potencia, sino también que la estructura misma esté a salvo de las tensiones causadas por las fluctuaciones de temperatura. Una chimenea o estufa bien mantenida no solo produce calor, sino también tranquilidad.

Principales características del cemento refractario

Una de sus características más sobresalientes es su alta resistencia al calor, permitiéndole resistir temperaturas que harían palidecer a los materiales convencionales.

Además, este cemento posee una baja conductividad térmica, lo que evita la pérdida innecesaria de calor y asegura un rendimiento eficiente en términos energéticos.

Su habilidad para mantener su integridad estructural incluso en condiciones de choque térmico es digna de admiración. Cuando el fuego arde a pleno apogeo, el Cemento refractario no se inmuta ante los cambios abruptos de temperatura, garantizando una durabilidad y longevidad excepcionales.

El cemento refractario se ha convertido en un elemento esencial en la creación y reparación de chimeneas y estufas. Su versatilidad permite dar forma a cámaras de combustión, revestimientos internos y externos, e incluso reparar grietas y daños en estas estructuras esenciales.

Las chimeneas y estufas revestidas con cemento refractario no solo presentan una apariencia rústica y auténtica, sino que también garantizan un rendimiento impecable. La eficacia de este compuesto se extiende a través del tiempo, ofreciendo un hogar seguro y acogedor durante numerosos inviernos.

Cómo aplicar cemento refractario: paso a paso

Prepara la zona: limpia la superficie de la chimenea o estufa, asegurándote de que esté libre de polvo, suciedad y residuos. Esto garantizará una adhesión óptima del cemento a la zona. 

Pon a punto el cemento: mezcla el cemento con agua, siguiendo las instrucciones del fabricante. Contarás con una pasta densa que puedas manejar. Sigue las proporciones adecuadas para asegurarte de que el cemento obtenga las propiedades óptimas.

Aplica el cemento: utiliza la espátula para aplicar una capa uniforme de cemento refractario en las áreas que lo requieran. Trabaja con movimientos firmes y precisos, asegurándote de cubrir todas las grietas y superficies. 

Alisa y modela: una vez que e el cemento esté aplicado, es el momento de dar forma y alisar la superficie, consiguiendo un acabado uniforme y atractivo.

Deja secar: permitir que el cemento refractario se seque de forma correcta es esencial para que alcance su resistencia máxima. Esto suele implicar dejar que el cemento repose durante un período de tiempo especificado por el fabricante.

El cemento refractario ha transformado el panorama de las chimeneas y estufas. Su capacidad para soportar temperaturas inclementes, su durabilidad sin igual y su versatilidad en la aplicación lo convierten en un elemento fundamental para cualquier entusiasta del calor hogareño.

NULL
También te puede interesar

Nuevo registro

¿Ya tienes una cuenta?
Entrar O Restablecer la contraseña