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Tubo calorifugado flexible
Para la canalización del aire y ruidos. Resisten temperaturas de hasta 250ºC.
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Tubos calorifugados flexibles
Los tubos calorifugados flexibles también son conocidos como conductos térmicos. Se trata de uno de los repuestos más importantes en chimeneas.
En este apartado, como especialistas en repuestos para chimeneas y estufas, queremos hablarte de la importancia de tener en cuenta algunos conceptos básicos para poder comprender la funcionalidad de un Tubo Calorifugado Flexible.
Un tubo calorifugado sirve como aislamiento térmico en instalaciones o equipamientos. Un Tubo Calorifugado Flexible es un objeto cilíndrico con abertura a los extremos, que tiene la capacidad para aislar altas temperaturas y que a su vez puede doblarse fácilmente.
En otras palabras, se trata de un tubo especial el cual sirve para aislar y transportar el calor de forma eficiente.
Características del Tubo Calorifugado Flexible
Se trata de un tubo flexible y extensible, formado de distintas capas, la primera es la interior hecha de aluminio. La segunda, se encuentra recubierta por un material aislante de lana de roca, la tercera está compuesta de aluminio. En concreto, esta última capa exterior sujeta las internas y a su vez todo el conjunto del tubo.
Por otra parte, a pesar de que los fabricantes o distribuidores aportan distintas descripciones sobre la forma en que está ensamblado el tubo, existen otras características. Este tipo de tubo se puede conseguir en diferentes diámetros, que oscilan entre los 80, 102, 127, 152 y 200.
En cuanto al largo de los Tubos Calorifugados Flexibles, se podría explicar de la siguiente manera. Posee 10 metros de longitud útiles, pero comprimidos se convierten en 1,1 metros. Es decir, alcanza a cubrir desde 1 metro 10 centímetros hasta 10 metros de distancia. En otras palabras, tiene forma de acordeón y puede estirarse a conveniencia según su capacidad.
Ademas conviene mencionar que el peso promedio de un Tubo Calorifugado Flexible es de aproximadamente 5 kilos. Esto puede variar según el fabricante. Antes hemos señalado que la función de este tubo es servir como conducto y aislante de las altas temperaturas en estufas y chimeneas.
Del mismo modo, hay que tener en cuenta el diámetro de espesor del tubo, el cual se traduce en una capa aislante de 25 milímetros. Tiene capacidad de aislar temperaturas que van desde los 20 grados centígrados hasta 250 grados aproximadamente.
Principales usos de los tubos calorifugados flexibles
Los tubos calorifugados flexibles suelen utilizarse para aislar térmicamente, es decir, para evitar cualquier fuga o entrada de aire que provenga del exterior.
A su vez, con el uso de este tubo se logra mantener caliente el aire que se encuentra en el interior del mismo. Esto en todos aquellos casos en los que se instalan para la canalización en chimeneas que emplean leña o en estufas.
También son frecuentemente utilizados para aislar la tubería por la cual se expulsa humo, en aquellos casos en los que hay combustibles cerca. Esto con el fin de que el humo no entre en contacto con estos elementos de combustión. De esta manera, evitar un desafortunado accidente.
Unido a lo que acabamos de ver este tipo de conductos térmicos también suelen ser empleados en instalaciones de ventilación y climatización. De modo que, son frecuentemente utilizados para la instalación de aires acondicionados. Pues este tipo de tubos no solo sirve para conservar el calor, sino que además ayudan a mantener bajas temperaturas, siendo la temperatura mínima -20 °C.
Además los tubos calorifugados son frecuentemente empleados para conductos que tienen como finalidad la extracción de gases.
Ventajas de los tubos calorifugados flexibles
- Un tubo calorifugado flexible proporciona una gran protección de los elementos externos que se encuentran en el ambiente, especialmente, el agua, los combustibles y el fuego.
- El tubo calorifugado flexible controla las temperaturas ya que ayuda a conservar el calor o el frío, según el uso y las finalidades para las que se esté empleando.
- Un tubo calorifugado flexible permite la extracción de gases, de este modo ayuda a mantener los espacios más frescos y libres de olores desagradables.
En definitiva, los tubos calorifugados flexibles o conductos térmicos son empleados con mucha frecuencia para controlar o mantener altas o bajas temperaturas. Además, están fabricados con materiales que aportan resistencia y durabilidad.
