TUBOS

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Conservar en buen estado las tuberías instaladas en nuestro hogar es clave para mejorar el funcionamiento de los equipos y también para evitar accidentes.

Asimismo, cuando se trata de tubos para chimeneas y estufas, estos deben mantenerse en un estado óptimo para no causar problemas en temporadas de invierno. El frío intenso puede afectar mucho a los equipos de calefacción y calor si no se prevén los problemas y se realizan los cambios oportunos. 

Desde repuestoschimeneas.es queremos daros toda la información sobre los tubos para chimeneas y estufas: desde su utilidad, repuestos, tipos y demás aspectos relacionados con el mundo de las tuberías. 

Empecemos por el principio: ¿para qué sirven exactamente los tubos para las chimeneas y las estufas?

¿Para qué sirven los tubos para chimeneas y estufas?

Los tubos para chimeneas y estufas son cilindros fabricados principalmente con metales capaces de soportar las altas temperaturas. Esto tiene como objetivo que estas piezas sean utilizadas en equipos de calefacción, como es el caso de chimeneas y estufas.

Además estos conductos no solo garantizan resistencia ante altas temperaturas, sino también la absorción del humo para enviarlo al exterior.

Cabe señalar que las características más importantes que deben tenerse en cuenta en el momento de comprar estos elementos son el material, el diámetro y el tipo de conexión.

Los tipos de tubos pueden ser rígidos, flexibles y varían según el equipo de calefacción. Además, pueden ser instalados en una pared simple o doble, también conocida como aislada, pero esto depende del tipo de tuberías.

Los tubos para chimeneas y estufas poseen  ciertas características que pasamos a comentar:

Las tuberías flexibles son mayormente usadas en conductos con desviaciones y, debido al tipo de fabricación, tienen un coste mayor al de los tubos rígidos.

Los tubos pueden ser instalados de manera visible o estar incorporados dentro de la fachada de la casa.

Antes de realizar una nueva instalación es necesario conocer y dar cumplimiento a las leyes y normas que rigen la evacuación de humo referente a calefactores.

Existen distintos tipos de conexiones en torno a los tubos. Entre ellas se encuentra la Te, la cual cuenta con tres vías de entrada y codos. También se dispone de manguito, tapón y conexiones antihollín.

Tipos de tubos para chimeneas

Existen muchas clasificaciones y materiales, que hacen que los tubos para chimeneas y estufas sean diferentes. Por tal motivo, los tipos de tubos se dividen en:

Conducto térmico: diseñado para la canalización de aire caliente con aluminio, y soporta hasta 250 grados centígrados. El diámetro es de 127 milímetros, por lo que se puede alargar o reducir.

Pellet vitrificado: diseñadas para estufas de pellet con material de acero y soldaduras láser. Se venden por metro, en un espesor de 80 y 100 milímetros. Su temperatura máxima es de 850 grados.

Pellet inoxidable: con acero inoxidable bajo una estructura de macho-hembra, además, permite el paso de combustibles sólidos, líquidos y gaseosos. Permite 200 grados con silicona y 600 sin junta de silicona. Se puede aplicar en calderas de gas, gasoil y estufas de combustibles fósiles.

Tubo flexible de aluminio: con medidas de entre 80, 90 y 100 milímetros de diámetro es uno de los más cómodos para la instalación de tubos para chimeneas y estufas. Su sistema de unión se da gracias al manguito y es altamente calificado en todos los tests de corrosión por condensación.

Tubo galvanizado: como su nombre lo indica, está hecho a base de acero galvanizado, y tienen una temperatura máxima permitida de 450°C. A diferencia de los otros tipos de tubo, en este solo se permiten combustibles en estado sólido y gaseoso.

Leña vitrificado: tiene un exterior lacado color negro mate, se ensambla con soldadura láser y tiene medidas de 80, 150 y 200 mm en cuanto a diámetro. Además, este tipo de tubo incluye una abrazadera para la unión y otros accesorios.

Leña inoxidable: A diferencia de la anterior, su acabado es brillante y se presenta en medidas comprendidas entre 120, 150 y 200 milímetros de diámetro. Puede soportar una temperatura de 200 o 600°C. Puede ser utilizado en casi cualquier tipo de espacio.

Los tipos de materiales son muy variados y dependen de lo solicitado por cada uno de los clientes. Lo que sí es un hecho, es que los nuevos materiales, hacen de esto una labor mucho más fácil en cuanto a limpieza y mantenimiento.

Si deseas alargar la vida útil de tu chimenea y estufa es fundamental que le des el mantenimiento adecuado y uses tubos de calidad. Pregúntanos en repuestoschimeneas.es 

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